Cientos de voluntarios acuden a limpiar las playas afectadas por la borrasca Gloria en Cataluña

Cientos de voluntarios han estado trabajando este fin de semana en la limpieza de las playas catalanas, en la que se amontonan toneladas de plásticos y residuos después del paso de la borrasca Gloria, para intentar recuperar la normalidad lo antes posible.

Los más de 500 municipios catalanes afectados por la borrasca amanecieron después del temporal con severos desperfectos, que ya se han comenzado a arreglar, aunque en algunos casos tardará meses, como en el caso de la línea férrea R1 entre Blanes y Malgrat.

En todo el litoral este domingo se han organizado decenas de iniciativas y grupos de limpieza que han acompañado a los servicios municipales y que, durante horas, se han dedicado a separar kilos y kilos de basura para contrarrestar así los efectos de la tormenta, que se ha ensañado especialmente con la costa, y que, además de algas y materia orgánica, también ha devuelto numerosos envases de plásticos.

Desde la localidad gerundense de L'Estartit hasta L'Ampolla (Tarragona), al lado del Delta del Ebro, voluntarios trabajan para recuperar las castigadas playas y retirar los restos expulsados por el mar o arrastrados por el vendaval, también en el área metropolitana de Barcelona y en la comarca del Maresme, una de las más hostigadas.

En Badalona, donde el Pont del Petroli resultó parcialmente afectado, decenas de voluntarios han recogido esta mañana residuos en la arena de la playa.

Una portavoz de Badalona pel Clima ha explicado que "entre los residuos plásticos recuperados había algún envase de yogur de una marca conocida de hace treinta años, pues lucía un antiguo logotipo".

Badalona pel Clima ha pedido al ayuntamiento de esta ciudad que declare la emergencia climática, como ya han hecho otros municipios, entre ellos Barcelona.